El envejecimiento activo es un proceso de adaptación. Los mecanismos adaptativos comúnmente aceptados actuando en ese proceso fueron propuestos por Paul y Margret Baltes y son la Optimización y Compensación Selectiva. Estos son mecanismos adaptativos son considerados universales en la regulación del desarrollo del individuo que actúan a lo largo del ciclo de la vida y producen distintas trayectorias de envejecimiento.

Optimización se refiere a la adquisición, aplicación e integración de recursos necesarios para lograr un alto nivel de funcionamiento. Tales recursos pueden ser internos (por ejemplo, tratar de desarrollar al máximo unos conocimientos específicos) o externos (por ejemplo, redes de apoyo, servicios de salud). ).

Un ejemplo claro es la inversión de tiempo y energía cuando pretendemos mejorar una afición, prácticamos asiduamente un deporte o hacemos entrenamientos para mejorar nuestros conocimientos profesionales.

Compensación trata de cómo afrontar impedimentos, pérdidas o déficit sustituyéndolo por otros recursos disponibles. Así, el mantenimiento del funcionamiento positivo cuando ha ocurrido una pérdida o un déficit conlleva a que el individuo re-estructure su sistema motivacional seleccionando otras metas y objetivos.

La Selección. Estos dos mecanismos requieren de la Selección, como forma de optar por una de las posibilidades que brinda la vida y que conforma el sistema motivacional de un individuo. La Selección se refiere al desarrollo, elaboración y valoración de condiciones apetitivas que conforman nuestro sistema de preferencias.

En otras palabras, Optimizar y Compensar requiere seleccionar opciones tanto de optimización como de compensación.
Estos mecanismos adaptativos de la optimización y compensación con selección se ajustan a las potenciales trayectorias de acción que propone la Organización Mundial de la Salud y que presentamos en la Figura aneja. En ella, podemos apreciar gráficamente cómo, a lo largo del desarrollo de la vida, el individuo (en sus primeros años, su familia y, siempre la sociedad que brinda posibilidades de desarrollo) tiene dos amplias perspectivas: seleccionar acciones que le lleven a un máximo desarrollo o, por el contrario, a un insuficiente funcionamiento y, en ese caso durante la vejez, con probabilidad, llevaría consigo enfermedad y discapacidad. Por el contrario, en el caso en que el individuo (en ausencia de accidentes o condiciones patogénicas) alcanzará la vida adulta y, posteriormente la vejez, en plenitud de recursos, alejado del umbral de la discapacidad (a partir del cual el individuo es dependiente, presenta discapacidad). Es esa una trayectoria positiva que aquí planteamos propia del “envejecimiento activo”, la cual llevará consigo un funcionamiento cognitivo óptimo.

El envejecimiento activo es el resultado del largo proceso de la vida que conlleva los mecanismos adaptativos anunciados anteriormente: a lo largo de ese proceso, la persona puede (y debe) Seleccionar cauces y condiciones para Optimizar un buen desarrollo; también, cuando ocurre algún déficit, tendrá que Compensarlo, todo ello implica un buen envejecimiento.

Cómo llegar a un envejecimiento activo con optimización y compensación
En resumidas cuentas el envejecimiento activo es el producto de una infancia y adolescencia , la persona (y el contexto familiar y social) con máximo crecimiento y desarrollo. Durante la vida adulta, esa persona ha seguido optimizando todo su potencial y acrecentando o manteniendo sus capacidades, y durante la vejez, sigue eligiendo escenarios que puedan llevarle a un óptimo funcionamiento y, en caso de déficit y declive, elige condiciones que permitan compensar las potenciales pérdidas surgidas: ello es envejecer activa, saludable y con éxito.

Las posibilidades de selección para la optimización y/o la compensación: distintas trayectorias de envejecimiento:

• El envejecimiento activo con optimización y compensación. Aunque el ambiente es importante, a lo largo del ciclo de la vida, el individuo es el principal actor de su propio envejecimiento y por tanto puede tomar decisiones sobre cómo mejorar su funcionamiento (intelectual o de otro tipo). En definitiva, existan distintas trayectorias en las formas de envejecimiento. Imaginemos una persona que llega a los 20 años con un máximo desarrollo y que sigue optimizando su funcionamiento intelectual a todo lo largo de la vida adulta , y compensando algunos déficit probablemente morirá después de su máxima esperanza de vida sobre los 87 años con una buena función cognitiva.

• El envejecimiento con discapacidad con adversas condiciones tempranas. Imaginemos ahora la persona que a lo largo de la infancia no recibió la estimulación adecuada y en la adolescencia eligió un contexto altamente nocivo para su desarrollo (amigos pendencieros que visitan lugares perniciosos). Lo probable es que alcance la vida adulta con un pobre funcionamiento cognitivo (tanto fluido como cristalizado) y que experimente tempranamente un declive y que alcance deterioro cognitivo y, probablemente, demencia llegados los 70.

Evidentemente, estamos tratando de realizar caricaturas de la realidad porque también pueden experimentar demencia y deterioro cognitivo personas que no han experimentado esas condiciones adversas en la infancia y adolescencia.

• El envejecimiento activo con optimización y compensación tardía. Finalmente, una tercera trayectoria procede de una persona con una evolución “promedio” tanto en la infancia y en la adolescencia como en la vida adulta. Pero, llegados los sesenta decide enriquecer sus estilos de vida realizando ejercicio aeróbico, entrenamientos cognitivos y rodeándose de un ambiente, altamente estimulante; esa elección “tardía” producirá sus efectos positivos en su funcionamiento general y particularmente cognitivo.

En otras palabras, nunca es tarde para decidir enriquecer nuestro ambiente y adoptar estilos de vida promotores de un buen funcionamiento en la vejez.

Teniendo en cuenta la investigación revisada en “Bases fundamentales. Actividad cognitiva” las claves para un buen envejecimiento lo siguiente:
• Realice actividad física aeróbica regular al menos tres veces por semana, al menos una hora por sesión (por ejemplo: andar muy deprisa, montar en bicicleta, nadar, bailar, etc.,). Ver: Cuide su cuerpo. Ejercicio físico.
• Realice actividad cognitiva diariamente:
o Utilice textos en los que encontrar ejercicios para mejorar la agilidad mental, la memoria, la aptitud espacial (ver bibliografía).
o Ejercítese empleando los materiales anexos (ver materiales).
o Conéctese con páginas Internet que proveen de material “on line”, tecleando en un buscador “brain training”, “ejercicios mentales”.
o Utilice el Nintendo (www.nintendo.com), que es una consola personal, trabajando con el programa “Brain training” o mediante un CD o DVD (por ejemplo www.smartbrain.net). Estos programas tienen la ventaja de ajustarse a su nivel de ejecución e informarle de sus progresos.
o Matricúlese en un Curso o Programa de Psicoestimulación o Memoria (ver, por ejemplo, Ayuntamiento de Madrid:Centro de Prevención del Deterioro Cognitivol
o Realice Pasatiempos que puede encontrar en la prensa o en cualquier Kiosko.
o Practique con asiduidad juegos y otras actividades cognitivas tales como el Ajedrez, Intelect, etc. Haga búsquedas en Internet sobre temas que le interesen, lea, mire cada palabra que desconoce en el diccionario, converse con su familia de temas de actualidad, sobre el programa de TV o la película que ha visto.
o Dado que es muy importante su implicación personal y el control de lo que quiere elegir para Optimizar y/o Compensar su funcionamiento cognitivo Programe su entrenamiento personal a partir de Mi Plan de Actividad Cognitiva (PAC) en el que decida qué actividad va a realizar y durante cuánto tiempo. Revise su PAC periódicamente para examinar si lo sigue.

Páginas Web:
InfoGerontologia
MadridSalud
Lumosity
Mentat
Montsevalls
Haga Negocios
Softonic
Memocoli
Neoteo
Mentat
Jugar Gratis
Salud180

Bibliografía:
Blanco, V. y Navazcués, P. (2009). Psicoestimulación. Ejercicios para estimular la cognición. Barcelona, Lebón.
Campayo, R. (2004) Desarrolla una mente prodigiosa. Madrid: EDAF
Calero, M. D. (2003) La actividad mental: prevención del envejecimiento cerebral. En “Vivir con Vitalidad® ”. Tomo 3 Madrid: Pirámide.
Fernández-Ballesteros, R. (Dir) (2003) Cuide su mente. “Vivir con Vitalidad®”Madrid: Pirámide.
Fonseca, A. (Dir.) (2008). Para mantenerse en forma. Juegos de mente . Barcelona. EDITEC
Lorraine, H. (2011) Como desarrollar su atención y su memoria. 2ª Edición. Barcelona: Gedisa
Moya, R. (2002). Repase lo aprendido. . En “Vivir con Vitalidad®”. Tomo 3 Madrid: Pirámide.
Ruiz Vargas, J. M. (2002). Mejore su memoria: siempre hay tiempo. En “Vivir con Vitalidad®” Tomo 3. Madrid: Pirámide. . En “Vivir con Vitalidad”. Tomo 3 Madrid: Pirámide.

MATERIALES DEL PORTAL DE MAYORES DEL INSTITUTO DE MAYORES Y SERVICIOS SOCIALES
www.madridsalud.es/interactivos/memoria/memoria.php
• Memoria. Programa de Estimulación y mantenimiento cognitivo. Miguel Ángel Maroto. Instituto de Salud Pública. CAM (pdf)
• Cuaderno de Introducción y Ejemplos. Estimulación cognitiva para adultos (60 fichas) . Andrés Sardinero Peña (pdf)
• Cuaderno de Ejercicio físico y memoria “Mueve tu cuerpo, Abre tu mente”. Pilar Pont. Consejo Superior de Deportes. Junto con “Decálogo sobre Consejos de vida saludable y ejercicio físico para personas mayores” (pdf)
• Volver a empezar. Ejercicios prácticos de actividad cognitiva para enfermos Alzheimer. Luis Tárraga y Mercé Boada. Fundación ACE y NOVARTIS (pdf)
• Programa de entrenamiento cognitivo para mayores deficientes visuales y ciegos. Gerardo Guerrero y Cristina Pérez .Ayuntamiento